Pequeños Milagros

Puedes ir a terapia y seguir amando a Jesús. Puedes tomar medicamentos mientras sigues creyendo que Dios te sanará. Es por eso que Dios creó médicos, terapeutas, consejeros y la medicina etc. ¡porque sabía que los necesitaríamos! ¿Imaginas un mundo sin ellos? Ese es un pensamiento aterrador. Simplemente me recuerda esa historia, una que la mayoría de nosotros hemos oído antes de un hombre que se estaba ahogando. En momentos separados, dos botes y un helicóptero aparecieron para rescatarlo, pero él insistió en que se fueran porque Dios lo rescataría. Cuando llegó al cielo le preguntó a Dios por qué no lo había salvado. Entonces Él respondió: “Te envié dos botes y un helicóptero y lo rechazaste”.

Sé que Dios todavía hace milagros todos los días. Eso creo sin duda. Pero también sé que Él me colocó aquí, en esta temporada, rodeado de estas personas por una razón. ¡Él me dio mi terapeuta, mis mentores, mis amigos y mi familia porque los está usando para ayudarme a sanar! A veces los milagros vienen en paquetes inesperados. A veces son ese mensaje de texto de un amigo que solo quiere ver cómo va tu día. A veces es la comida que te trae un miembro de la familia cuando parece que no puedes levantarte de la cama ese día. A veces es la tontería que dijo tu hijo lo que te hace reír a carcajadas. A veces es un te amo de un padre o del amor de tu vida. A veces es el medicamento que tomas todos los días para poder sentirte como antes. O a veces Dios te sanará por completo. Mantén la fe, sigue orando, sigue buscando. Mientras esperas tu milagro, no dejes de apreciar los que suceden todo los días a tu alrededor.

Previous
Previous

Al que se siente solo,

Next
Next

Querida Mamá Avergonzada,